«El financiamiento no es suficiente», expresa un comunicado difundido este miércoles por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en el que anuncia el recorte de la ayuda alimentaria para Venezuela.
La disminución del financiamiento, a la mitad, afectará a 400.000 personas que eran asistidas en zonas remotas y vulnerables del país.
«La parte más difícil de nuestro trabajo no siempre es la logística. A veces son las palabras», reza el escrito difundido por la agencia.
Las estimaciones de la ONU indican que al menos 4 millones de personas en Venezuela necesitan ayuda humanitaria, sin embargo, el PMA desarrollaba proyectos presupuestados en 40,3 millones de euros con los que se beneficiaban unos 400 mil ciudadanos.
Los estados que ya no contarán con este programa serán: Anzoátegui, Barinas, Monagas, Trujillo y Yaracuy.
«Ha sido una decisión muy difícil que hemos tomado luego de explorar e intentar muchísimas opciones», dijo Lucía Ruz, asociada del programa de las Naciones Unidas.
Tras perder la financiación de Estados Unidos, el PMA sólo podrá ayudar a la mitad de las personas que servía en el mundo. Washington anunció en enero la congelación de su ayuda exterior y el desmantelamiento de la agencia USAID, acusada sin pruebas por el presidente Donald Trump de corrupción.
Aunque inicialmente se había asegurado que la ayuda alimentaria de emergencia se mantendría, el recorte los dejó sin suficientes fondos.
Otros programas de la ONU también se han visto afectados, incluyendo proyectos de salud reproductiva del UNFPA, nutrición y agricultura, fundamentales en un país donde 80% de la población depende de la tierra para sobrevivir.
Con información de NTN24