Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán, se declaró culpable de cuatro cargos criminales en Estados Unidos, en dos relacionados contra el narcotráfico dirigidos contra el «Cártel de Sinaloa».
Guzmán López, también conocido como «El Ratón» o «El Chapito», se enfrenta a dos cargos por distribución de drogas y dos por participación en una organización delictiva continua.
Los fiscales alegan que Guzmán López junto a sus hermanos, conocidos como «Los Chapitos», revitalizaron el Cartel de Sinaloatras la captura de su padre en 2016, adoptando la producción y distribución de fentanilo como su principal fuente de ingresos.
El joven narcotraficante fue extraditado a Estados Unidos en 2023 y fue parte de una estrategia más amplia del gobierno federal para combatir la crisis del fentanilo, una poderosa droga que ha cobrado la vida de miles en Estados Unidos y se convirtió en una emergencia de salud pública en el país norteamericano.
Antes de la declaratoria de culpabilidad de Ovidio Guzmán López, la presidente mexicana Claudia Sheinbaum criticó una supuesta falta de coherencia en la política estadounidense.
Sheinbaum argumenta que Washington considera terroristas a grupos del crimen organizado, pero al mismo tiempo negocia con líderes del narcotráfico.
Con información de NTN24