Los términos para la judicialización del menor capturado como presunto responsable de atacar a Miguel Uribe en un mitin político y en la localidad de Fontibón, están por cumplirse. La Fiscalía recupera todos los elementos de prueba que llevará a la audiencia y ante el juez de menores. Sin embargo, un hecho insólito se atraviesa en la rutina.
Fuentes judiciales advirtieron que en el curso de la investigación desapareció el celular que tenía el menor al momento de ser capturado. Nadie da razón del aparato y es una situación que preocupa a los responsables del proceso, por lo que se revisa qué pudo ocurrir y dónde está el celular que tendría información relevante para la investigación.
El celular es una pieza fundamental para adelantar toda la investigación, pues allí estarían las conversaciones previas que tuvo el menor de edad con quien, aparentemente, le estaría dando órdenes de atacar a Miguel Uribe. En ese caso, como en otros, este aparato de comunicación se convierte en un elemento sustancial para cualquier investigación.
Hasta el momento no está claro de qué forma desapareció el celular que debería estar en poder de la Fiscalía, en cadena de custodia y siendo objeto de análisis de los investigadores para la posterior judicialización del menor, un elemento de prueba que, para los expertos, resulta indispensable para avanzar en el proceso.
Con información de Revista Semana
