RDN – Caracas, 02 de Agosto del 2024. El gobierno nacional, canceló los vuelos a algunos países, entre ellos dos que en tiempos normales son importantes centros para los viajeros que se dirigen hacia o desde Venezuela: Panamá, centro de operaciones de la aerolínea Copa Airlines, y República Dominicana, además de eso, Perú también está vetado, en la cancelación de boletos aéreos.
La única opción de vuelos regionales para salir del país que queda es Bogotá, pero los precios se han disparado.
Un viaje dentro de dos semanas desde Caracas a la capital colombiana, que dura unas dos horas, solía costar menos de 200 dólares, pero el viernes pasado el precio superaba los 800 dólares, reseñó Bloomberg.
La falta de alternativas está dejando varados a los venezolanos que viven en el extranjero y regresaron a votar en las elecciones del 28 de julio.
“Cambio de gobierno”
Muchos tenían la esperanza de que un posible “cambio de gobierno” provocara una transformación del país que les permitiera regresar de forma permanente. Ahora, algunos dicen que están desesperados por irse y temen quedar atrapados.
Eugenia, un venezolana de 27 años, viajó a Caracas desde Panamá, donde vive con su esposo y su hijo de tres meses, para votar y aprovechar la oportunidad de estar con su familia para bautizar al bebé.
Pero ahora no tienen boletos de regreso. El bautizo también fue cancelado, después de que estallaron las protestas y los cuerpos de seguridad comenzaron “a reprimir” a los disidentes.
Eugenia, quien pidió no publicar su apellido, supo que salir de Venezuela no iba a ser fácil desde que comenzaron las protestas al día siguiente de las elecciones y los manifestantes bloquearon la principal carretera que conduce al aeropuerto de la capital.
Dijo que regresar a Panamá vía Colombia ahora costará hasta 1.500 dólares los boletos, frente a los 330 dólares que pagaban originalmente por cada viaje ida y vuelta.
“No sabemos qué va a pasar”, señaló. “Tememos escasez de alimentos y hay rumores de que puede haber un nuevo apagón nacional” similar a un corte de luz que se produjo en 2019 y que obligó a cancelar los boletos en medio de la agitación política.