El presidente de Colombia, Gustavo Petro, aseguró este martes que su país no prestará su territorio para una posible invasión a Venezuela y criticó la presencia naval de Estados Unidos en el mar Caribe.
“Tenemos que hablar de la posible invasión a Venezuela con la que amenazan. Pueden ser palabras, ojalá. Colombia no prestará su territorio para ninguna invasión a un país vecino ni a ninguno de sus hombres”, dijo Petro durante su participación en Manaos en la inauguración de un centro de cooperación policial internacional en la Amazonía.
El mandatario reconoció que en Venezuela existe un “problema político interno”, razón por la que —según afirmó— su gobierno no ha reconocido a la administración de Nicolás Maduro tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024.
“¿Cómo vamos a permitir una invasión a Venezuela? ¿Hay un problema político allá? Sí. Yo no he reconocido al gobierno venezolano por las elecciones”, añadió, al tiempo que señaló que su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha asumido una postura similar.
“Nos critican unos, pero eso no significa que no sepamos que un conflicto político interno, como tantos que hemos tenido, se resuelve hablando entre los venezolanos. ¿Nos van a decir que se resuelven con misiles como en Palestina?”, continuó.
Dirigiéndose a Lula da Silva y a la vicepresidenta de Ecuador, María José Pinto —con quienes coincidió en Manaos—, Petro afirmó que los países de América Latina pueden estar distanciados ideológicamente, pero deben unirse para ayudar a resolver la crisis venezolana.
“Es la hora de hablar. Los invito a que busquemos que un cuerpo de países suramericanos vuelva a impulsar un diálogo político en Venezuela. Porque el pueblo venezolano tiene que unirse para resolver sus problemas ante una amenaza de invasión”, resaltó.
El presidente colombiano destacó que un problema político interno no justifica amenazas a la soberanía de ningún país de Suramérica y subrayó que la región debe mantenerse unida ante una eventual intervención extranjera.
“Si se trata de una invasión extranjera en América del Sur, nadie debe apoyarla. Una cosa es resolver un tema político y otra muy distinta es acabar con nuestra dignidad y soberanía”, señaló.
Por otra parte, Petro insistió en que el ataque a una embarcación en el Caribe, presuntamente vinculada al narcotráfico y que dejó once muertos, debe ser tratado como un “asesinato”. Aseguró que, si los países de Suramérica no protestan por ese hecho, podrían enfrentar consecuencias en el futuro.
“América Latina, que es la dueña del Caribe, no va a soportar eso y quedarse callada, porque si no después las bombas caerán en Bogotá, Río de Janeiro, Manaos y otras ciudades de la región”, advirtió.
Finalmente, subrayó que ningún gobierno debe alinearse con “los genocidas”, porque “después las bombas caerán sobre nosotros”.
Con información de El Cooperante